El jueves día 15 de junio, en una celebración presidida por el obispo de nuestra diócesis, despedimos a quien fue sacerdote en el seno de nuestra comunidad parroquial durante muchísimos años, nuestro querido D. José.
Con sencillez y con la hondura de la fe dimos gracias a Dios por el regalo de su ministerio y pedimos al Padre Bueno que pueda participar de la presencia de aquel en quien creyó y a quien sirvió durante toda su vida. Gracias D. José por tanto bien hecho a la vida de la Iglesia y a esta parroquia que fue y seguirá siendo siempre su casa.
Con sencillez y con la hondura de la fe dimos gracias a Dios por el regalo de su ministerio y pedimos al Padre Bueno que pueda participar de la presencia de aquel en quien creyó y a quien sirvió durante toda su vida. Gracias D. José por tanto bien hecho a la vida de la Iglesia y a esta parroquia que fue y seguirá siendo siempre su casa.