
El triduo celebrado y culminado por la procesión con las imágenes de S. Telmo y Nuestra Señora de la Luz, fue una ocasión para celebrar la fe, para compartir la vida, para alegrarnos juntos en torno a quienes son patronos de algunos de nuestros barrios. Gracias, gracias a todos los que han hecho posible estos días de fiesta. Y los que la aderezaron con su música, con su pregón, con su servicio. Que la Virgen de La Luz nos proteja a todos.